07/01/2022
Dentro del vasto universo de las terapias ayurvédicas, emerge una práctica milenaria de profunda sabiduría: la terapia de puntos Marma, también conocida como Marmani Chikitsa. Esta disciplina ancestral se centra en la estimulación de puntos sensibles distribuidos por todo el cuerpo, con el noble propósito de promover la sanación en los planos físico, mental y emocional. Su influencia radica en la capacidad de afectar directamente el flujo del prana, esa energía vital que anima y sustenta toda forma de vida según la filosofía ayurvédica. Fundamentada en la aplicación de digitopresión sobre 108 puntos específicos, esta terapia ofrece una vía única para restaurar el equilibrio y la armonía interna.

El Ayurveda, como ciencia de la vida, nos enseña una verdad fundamental: para gozar de una salud óptima, es imprescindible que nuestra energía vital fluya sin obstáculos. Cuando nuestra condición interna se ve alterada, ya sea por factores externos o por la influencia de pensamientos y actitudes negativas como el resentimiento o la rabia, este flujo energético puede verse bloqueado. La consecuencia inmediata es una desconexión, una falta de armonía entre el cuerpo y la mente, que nos impide experimentar la vida en su máximo potencial.
Desde la perspectiva ayurvédica, todo lo que existe, creado a partir de los principios cósmicos de Purusha y Prakriti, comparte una esencia fundamental. Aunque la percepción de esta unicidad universal puede resultar elusiva para la mente ordinaria, los puntos Marma actúan como puntos de entrada extraordinariamente sensibles hacia esos reinos más sutiles, revelando la intrincada conexión físico-energética que reside en cada ser humano. En palabras del Dr. Vasant Lad, una autoridad en Ayurveda: «como la mecánica cuántica, el Ayurveda sostiene que el ser humano no es una estructura material sólida y estable, sino una colección de energía e inteligencia dinámica y cambiante dentro del campo más grande de energía e inteligencia que es el universo».
¿Qué Define a un Punto Marma?
Los puntos Marma son conceptualizados como vórtices de prana, la fuerza de vida, y funcionan como accesos directos a este campo energético dinámico y en constante transformación. El cuerpo humano alberga un total de 108 de estos puntos energéticos, cuya estimulación es clave para activar diversas funciones corporales y mantener un estado de salud vibrante. A pesar de que su localización no puede ser verificada mediante instrumentos científicos convencionales, la tradición ayurvédica sostiene con firmeza que un bloqueo o disfunción en cualquiera de estos puntos puede ser el origen de la enfermedad.
La mayoría de estos puntos vitales se sitúan en áreas cruciales donde convergen estructuras importantes, como tendones, arterias y venas principales, así como las articulaciones de mayor tamaño. Los textos ayurvédicos antiguos describen los puntos Marma como zonas del cuerpo donde dos o más sistemas vitales se entrelazan de manera compleja. Esto incluye la unión de nervios y vasos sanguíneos, la conexión entre huesos y nervios, o la confluencia de músculos, ligamentos y articulaciones.
En esencia, un punto Marma es una concentración de energía vital. Por esta razón, un daño significativo en cualquiera de estos puntos puede tener consecuencias graves, llegando incluso a causar enfermedades severas. Estos puntos se distribuyen por todo el cuerpo, abarcando desde las extremidades (manos y pies) hasta el tronco y la cabeza. La manipulación terapéutica de los puntos Marma, que puede implicar masajes, la aplicación de aceites medicados y hierbas específicas, calor o presión, tiene la capacidad, según expertos como el Dr. Muley, de «alterar las funciones orgánicas y las condiciones estructurales del cuerpo».
Existen tres centros Marma considerados principales y de vital importancia: la cabeza, el corazón y la vejiga. Una lesión crítica en cualquiera de estos centros se considera potencialmente mortal.
Marma, Karma y Energía Vital
La comprensión de la reencarnación y la ley del karma son pilares fundamentales en la cosmovisión ayurvédica. Al integrar estos conceptos, se abre la posibilidad de explorar explicaciones alternativas para enfermedades que, a primera vista, parecen surgir sin una causa evidente, especialmente en el caso de los niños. En estas situaciones, el Ayurveda postula que puede existir una predisposición subyacente hacia un determinado trastorno, arrastrada desde vidas anteriores. Se considera que, al momento del nacimiento, los puntos Marma, que funcionan como mecanismos autorreguladores, aún pueden estar bloqueados.
En ciertas personas, el flujo armonioso del prana a través de estos puntos puede verse impedido por la persistencia de recuerdos o impresiones (samskaras) de existencias pasadas. Aunque estos recuerdos puedan residir en niveles inconscientes, tanto ellos como cualquier trauma asociado pueden ejercer un profundo impacto en el bienestar presente del individuo.

Por consiguiente, una de las tareas esenciales del médico o terapeuta ayurvédico es identificar y tratar ciertos puntos Marma específicos con el fin de liberar la energía estancada. Al permitir que el prana fluya sin restricciones, se facilita el proceso de sanación y se contribuye a la eliminación de la enfermedad.
Historia y Evolución de la Terapia Marma
Si bien el propósito primordial de la terapia de puntos Marma en la actualidad es promover la sanación y el bienestar, es crucial reconocer que, dada su naturaleza de puntos vitales y vulnerables, también ha sido utilizada históricamente con fines perjudiciales. Como señala el Dr. Marc Halpern, «Cualquier área del cuerpo vulnerable de lastimarse con un golpe contundente, se puede sanar con un toque terapéutico». Esta dualidad inherente a los puntos Marma subraya su profundo poder.
Como componente esencial del Ayurveda, el Yoga y las artes marciales tradicionales del sur de la India, la práctica de Marma tiene sus raíces en la civilización más antigua de la India, la cultura Indus-Sarasvati (aproximadamente 3500 – 1700 a.C.), que floreció en el norte del subcontinente y se desarrolló paralelamente a otras disciplinas védicas de aquel tiempo.
El conocimiento de los puntos Marma fue fundamental en las artes marciales del sur de la India. Se utilizaba tanto como un medio estratégico para incapacitar a un oponente, como una guía vital para tratar las heridas infligidas en combate, e incluso como un mapa para diseñar y utilizar armaduras de protección. Según el Dr. David Frawley, una de las principales autoridades occidentales en Ayurveda, Marma representaba «el camino del guerrero que aprendió a dominar su prana para fines ofensivos y defensivos».
En la época clásica, los cirujanos militares poseían un conocimiento profundo de la energética de los puntos Marma. Esta pericia les permitía ofrecer la mejor atención médica posible en el campo de batalla, comprendiendo qué áreas evitar y cuáles tratar. Las referencias a estos puntos vitales se encuentran dispersas en una amplia gama de textos antiguos, incluyendo el Rig Veda, el Mahabharata, el Charaka Samhita, el Sushruta Samhita, y textos clásicos del Yoga donde Marma se integra con la práctica de asanas, pranayama y el estudio de los nadis (canales energéticos).
El cirujano ayurvédico Sushruta es especialmente reconocido por sus invaluables contribuciones al estudio clásico de Marma. Su obra magna, el Sushruta Samhita, define los Marma como puntos fatales y detalla técnicas de manipulación, incluyendo procedimientos quirúrgicos y tratamientos para condiciones graves. La sección de anatomía de este texto ofrece una documentación exhaustiva sobre la ubicación precisa y los efectos específicos de cada punto. Este conocimiento ha sido transmitido y enriquecido a lo largo de generaciones de practicantes.
Marma y Acupuntura: Un Paralelismo Histórico
Existe un debate académico sobre la relación entre el conocimiento ayurvédico de Marma y el antiguo método chino de tratamiento conocido como acupuntura. K.R. Krikantha Murthy señala una tendencia reciente entre algunos eruditos ayurvédicos a correlacionar y equiparar ambos sistemas. Si bien el reconocimiento de puntos específicos en el cuerpo es una característica compartida, el objetivo inicial de cada enfoque parecía ser distinto.
Tradicionalmente, mientras el Ayurveda describía los Marma como asientos del prana, estas descripciones estaban principalmente destinadas a alertar al cirujano sobre las áreas a evitar para no causar daño. En contraste, en la acupuntura, los puntos se consideran centros de energía vital (Qi) que, al ser estimulados con agujas, buscan curar diversas enfermedades. Históricamente, los textos ayurvédicos no parecían sugerir la manipulación de Marma con el fin explícito de aliviar el dolor o curar enfermedades.
Sin embargo, investigaciones más recientes han arrojado nueva luz sobre esta cuestión. El Dr. Frank Ros afirma que se cometieron errores en traducciones anteriores del Sushruta Samhita. Tras una revisión minuciosa, se encontró evidencia que sugiere una correspondencia precisa entre los puntos Marma y los puntos tradicionales de acupuntura utilizados para tratar órganos vitales y regular el flujo de Qi. Términos ayurvédicos como dhamanis y siras, previamente interpretados erróneamente como arterias y venas, en realidad corresponderían a los canales sutiles que controlan el flujo de prana (o Qi).

Numerosos eruditos importantes de Ayurveda, incluido el Dr. Vasant Lad en su libro «Marma Points of Ayurveda», coinciden con la afirmación del Dr. Ros y establecen comparaciones detalladas entre los puntos Marma y los puntos de acupuntura china. Esta perspectiva sugiere que, aunque sus aplicaciones iniciales pudieron diferir, existe una base conceptual y anatómica compartida.
Independientemente de si los Marma se utilizaron primariamente para la curación en la antigüedad, es una realidad que hoy en día su uso terapéutico está extendido en clínicas y escuelas ayurvédicas alrededor del mundo, consolidándose como una poderosa herramienta de sanación.
Beneficios de la Terapia de Puntos Marma
La manipulación terapéutica aplicada a los puntos Marma tiene la capacidad de influir en las funciones corporales de manera muy similar a como lo hace la acupuntura. De hecho, una teoría postula que fragmentos de los textos ayurvédicos que describen los Marma pudieron haber llegado a China en la antigüedad, donde evolucionaron hasta dar origen a la práctica de la acupuntura.
El Ayurveda enseña que la estimulación de los puntos Marma puede modular la energía de los tres doshas principales: vata, pitta y kapha. Al trabajar sobre estos puntos, se ayuda a reequilibrar la constitución energética única de cada individuo, promoviendo así la salud y la armonía. Esta terapia es particularmente efectiva para liberar los bloqueos energéticos que pueden manifestarse en los cuerpos físico, mental y emocional.
Además de su acción sobre los doshas y los bloqueos energéticos, la terapia Marma ofrece una amplia gama de beneficios, incluyendo:
- Activación y mejora del funcionamiento de los órganos internos.
- Fortalecimiento del sistema inmunitario.
- Ayuda en la liberación de toxinas acumuladas en el cuerpo.
- Restablecimiento de la fluidez natural de la energía vital y sutil.
Gracias a estos efectos multifacéticos, la terapia de puntos Marma ha demostrado ser exitosa en el tratamiento de diversos trastornos y afecciones, tales como:
- Ansiedad y estrés.
- Artritis y dolores articulares.
- Fatiga crónica.
- Síndrome del intestino irritable.
- Falta general de vitalidad.
- Migrañas y dolores de cabeza.
- Lesiones neuromusculares.
- Ciertas afecciones cutáneas.
- Otros desequilibrios energéticos y físicos.
Es importante destacar que, aunque la base son los 108 puntos, un terapeuta experimentado puede enfocar la sesión en puntos específicos relacionados con una dolencia o un sistema orgánico particular, adaptando el tratamiento a las necesidades individuales del paciente.
Resolviendo tus Dudas sobre la Terapia Marma
Para quienes consideran explorar esta terapia, es natural tener algunas preguntas. Aquí abordamos las más comunes:
¿Es una terapia agradable de recibir?
La respuesta honesta es que no siempre es una experiencia completamente agradable en términos de sensación física. La estimulación de los puntos Marma a menudo implica una digitopresión profunda, necesaria para alcanzar las capas energéticas y físicas que requieren ser liberadas. Esta presión, aunque beneficiosa, puede generar una sensación de dolor o molestia significativa en los puntos tratados.
¿La terapia Marma es de larga o corta duración?
Una sesión completa de terapia Marma, que implica la estimulación de los 108 puntos distribuidos por todo el cuerpo, suele ser un proceso extenso, con una duración aproximada de dos horas y media. Sin embargo, muchos terapeutas optan por enfocarse en áreas o dolencias específicas, trabajando únicamente sobre un subconjunto de puntos Marma relevantes. En estos casos, la duración de la sesión es considerablemente más breve, adaptándose a las necesidades y el tiempo disponible del paciente.
La terapia de puntos Marma representa una conexión profunda con los principios energéticos del Ayurveda, ofreciendo una vía poderosa para influir en la salud y el bienestar a través de la manipulación de estos puntos vitales. Su rica historia y su creciente aplicación terapéutica la posicionan como una valiosa herramienta dentro de las medicinas complementarias.
Si quieres conocer otros artículos parecidos a ¿Qué son los Puntos Marma en Ayurveda? puedes visitar la categoría Acupuntura.
Conoce mas Tipos