31/05/2024
Aunque a menudo eclipsado por los peligros evidentes del calor, el frío representa un desafío significativo para nuestra salud, un aspecto médico que a veces pasa desapercibido. Sus efectos no siempre son instantáneos; de hecho, los primeros síntomas de haber estado expuesto a bajas temperaturas pueden manifestarse varios días después. La temperatura ambiente juega un papel crucial en nuestro bienestar, especialmente en invierno, cuando las oscilaciones térmicas son notables, pasando de temperaturas bajo cero por la noche a valores más moderados durante el día. Sin embargo, nuestro organismo está diseñado para mantener una temperatura interna constante, un equilibrio que el frío extremo puede alterar drásticamente.

- ¿Qué Sucede Cuando el Cuerpo se Expone al Frío?
- El Frío y el Sistema Inmunitario
- Impacto del Frío en la Salud y las Enfermedades
- Hipotermia: Cuando el Cuerpo Pierde el Calor
- Congelación: Daño Localizado por Frío Extremo
- Medidas Preventivas Clave
- ¿Qué Hacer Ante un Posible Caso de Hipotermia?
- Preguntas Frecuentes sobre el Frío y la Salud
¿Qué Sucede Cuando el Cuerpo se Expone al Frío?
La exposición al frío desencadena una serie de respuestas fisiológicas destinadas a preservar el calor corporal y proteger los órganos vitales. Es un mecanismo de supervivencia inherente. La primera línea de defensa incluye:
- Vasoconstricción cutánea: Los vasos sanguíneos cerca de la superficie de la piel se contraen, reduciendo el flujo sanguíneo a las extremidades y la piel. Esto minimiza la pérdida de calor por radiación y convección.
- Incremento de la actividad cardiovascular: El corazón trabaja más para mantener la circulación, lo que puede llevar a una elevación de la presión arterial y el ritmo cardiaco.
- Incremento de la capa de aislamiento: La erección de los vellos corporales (piloerección) intenta crear una capa de aire aislante, aunque en humanos esta respuesta es menos efectiva que en animales con pelaje denso.
- Incremento de la producción de calor metabólico: El cuerpo genera calor adicional mediante procesos metabólicos, siendo el temblor o tiritar la manifestación más visible y efectiva de este mecanismo.
Estas respuestas son vitales para mantener la temperatura interna, pero también imponen un estrés considerable al organismo, especialmente al sistema cardiovascular.

El Frío y el Sistema Inmunitario
Un efecto menos conocido pero crucial del frío es su capacidad para inhibir las respuestas inmunitarias. Este fenómeno contribuye significativamente al aumento de infecciones, particularmente las respiratorias, que observamos durante los meses invernales. Curiosamente, la fiebre, que es una elevación de 1 o 2 grados en la temperatura corporal, mejora la respuesta inmunitaria y dificulta la multiplicación de ciertos gérmenes. Esto subraya la compleja relación entre la temperatura y la capacidad del cuerpo para defenderse de las enfermedades.
Impacto del Frío en la Salud y las Enfermedades
El efecto del frío en la aparición de enfermedades es principalmente indirecto. Las bajas temperaturas provocan cambios fisiológicos que, en la práctica, se asocian con un mayor riesgo de enfermar o incluso morir. Se ha documentado una clara relación entre el descenso de la temperatura ambiental y el aumento de las admisiones hospitalarias y consultas ambulatorias por urgencias médicas, especialmente por enfermedades respiratorias y cardiovasculares. La mortalidad también tiende a aumentar en asociación con estos cambios de temperatura. Es notable que los ingresos por urgencias respiratorias suelen aumentar significativamente entre 11 y 14 días después de un descenso marcado de la temperatura, principalmente en invierno.
En condiciones ambientales extremadamente frías, la capacidad del cuerpo para generar calor internamente (metabolismo) puede no ser suficiente para compensar la pérdida de calor hacia el exterior. Esto puede llevar a una disminución progresiva de la temperatura interna, culminando en lo que conocemos como hipotermia.
Hipotermia: Cuando el Cuerpo Pierde el Calor
Desde una perspectiva médica, la disminución de la temperatura corporal por debajo de lo normal se define como hipotermia. Considerando que la temperatura corporal normal es de aproximadamente 37ºC, una medida por debajo de 35ºC tomada en el recto se considera hipotermia. Esta condición se produce cuando el cuerpo disipa calor más rápido de lo que puede producirlo, generalmente debido a una exposición prolongada al frío.
La hipotermia puede variar en gravedad y, si no se trata adecuadamente, puede tener consecuencias muy serias. La permanencia en un estado hipotérmico, incluso en condiciones menos severas que no llegan a la muerte inmediata, deteriora progresivamente los procesos fisiológicos. El sistema cardiovascular es uno de los más exigidos y, por tanto, de los más afectados. Las personas en los extremos de la vida, como los menores de 5 años y los mayores de 60 años, son particularmente vulnerables a los efectos del frío y la hipotermia debido a sus mecanismos termorregulatorios menos eficientes.
Tipos de Hipotermia
Podemos distinguir dos niveles principales de hipotermia, cada uno con sus propios síntomas y requerimientos de atención:
Hipotermia Leve:
- Se produce cuando la temperatura corporal desciende por debajo de 37°C (aunque la definición general de hipotermia sea <35°C, este rango inicial ya muestra síntomas).
- Síntomas: Respiración y pulso acelerados, temblores aumentados, manos y pies fríos y pálidos. Fatiga, escalofríos, irritabilidad, lenguaje o comportamiento inapropiados.
- Acción recomendada: Animar a la persona a moverse para generar calor muscular. Aislarla del viento y la lluvia. Cambiar la ropa mojada por seca. Proporcionar bebidas calientes (no alcohol ni cafeína).
Hipotermia Grave:
- Se produce cuando la temperatura del cuerpo desciende por debajo de 33°C.
- Síntomas: La situación es mucho más crítica. El paciente deja de temblar, los músculos se endurecen, los labios y las extremidades se vuelven azules. El pulso y la respiración se vuelven progresivamente más lentos. Aparecen confusión e indiferencia, seguidas de somnolencia, pérdida de conciencia y finalmente coma.
- Por debajo de 30°C: Los signos vitales pueden ser difíciles o imposibles de detectar. La víctima puede parecer muerta: pupilas fijas y dilatadas, ausencia de pulso detectable, respiración muy débil. Existe un alto riesgo de insuficiencia cardíaca y muerte.
- Acción recomendada: Hospitalización inmediata. Mientras llega la ayuda de emergencia, cubrir a la víctima con mantas gruesas y trasladarla cuidadosamente a un lugar protegido del frío. El calentamiento debe ser gradual (ropa seca, fuentes de calor ambiental), *evitando* frotar las extremidades, exponer a calor directo o dar bebidas calientes que puedan aumentar la temperatura interna demasiado rápido y causar un shock peligroso. Es absolutamente necesario llamar al 112.
Comparativa Hipotermia Leve vs. Grave
Característica | Hipotermia Leve | Hipotermia Grave |
---|---|---|
Temperatura Corporal | < 37°C (síntomas iniciales), formalmente < 35°C | < 33°C |
Temblores | Aumentados | Cesan |
Músculos | Normales | Endurecidos |
Piel y Extremidades | Frías, pálidas, blancas (manos/pies) | Azules (labios, extremidades) |
Pulso y Respiración | Acelerados | Lentos, débiles |
Estado Mental | Fatiga, irritabilidad, lenguaje/comportamiento inapropiado | Confusión, indiferencia, somnolencia, pérdida de conciencia, coma |
Acción Inmediata | Moverse, aislar, ropa seca, bebidas calientes (no alcohol/cafeína) | Llamar 112, hospitalizar, cubrir con mantas, calentar gradual (no frotar, calor directo, bebidas muy calientes) |
Congelación: Daño Localizado por Frío Extremo
Otro peligro significativo de la exposición al frío extremo es la congelación. Afecta típicamente a las partes del cuerpo más expuestas y con menor flujo sanguíneo, como los pies, las manos, las orejas, la nariz y las mejillas. La congelación puede ser extremadamente grave, llegando a requerir la amputación de las partes afectadas o dejando secuelas permanentes.
Las señales de advertencia de congelación incluyen una pérdida gradual de sensibilidad, entumecimiento, torpeza en los movimientos y un cambio de color en las zonas afectadas, que pueden volverse pálidas o azules. Ante la sospecha de congelación, es crucial actuar correctamente:
- Aplicar calor de forma lenta y continua, tanto en las zonas afectadas como en el resto del cuerpo.
- Evitar diferencias bruscas de temperatura. Nunca sumergir una extremidad congelada en agua muy caliente ni exponerla directamente a una llama o fuente de calor intenso.
- Nunca frotar, tocar o golpear las áreas congeladas. Esto puede causar daño adicional a los tejidos.
Medidas Preventivas Clave
Dada la importancia de protegerse del frío, es fundamental adoptar medidas preventivas adecuadas:
- Vacunación: En personas mayores, enfermos crónicos y aquellos con sistemas inmunitarios deprimidos, las vacunas contra la gripe y el neumococo son esenciales para prevenir procesos respiratorios graves desencadenados por las bajas temperaturas.
- Vestimenta adecuada: Usar varias capas de ropa suelta, ligera, cálida e impermeable es ideal. Varias capas atrapan mejor el aire aislante que una sola prenda gruesa. Evitar la ropa apretada que dificulta la circulación. Es vital proteger las extremidades y la cabeza, ya que una gran cantidad de calor corporal se pierde por estas áreas. Usar guantes, gorros, sombreros, bufandas y calcetines de lana. El calzado debe ser cálido, resistente al agua y antideslizante.
- Evitar cambios bruscos de temperatura: Limitar las salidas a la calle en días muy fríos y, si se sale, que sean breves.
- Mantenerse seco: El agua y la humedad aceleran drásticamente la pérdida de calor. El cuerpo pierde calor veinticinco veces más rápido en agua que en aire seco. Si la ropa se moja, cámbiela lo antes posible.
- Temperatura del hogar: La temperatura ideal en casa es de 21ºC. Temperaturas superiores no aportan beneficios adicionales y sí implican un derroche energético. Ventilar diariamente las habitaciones durante unos diez minutos es suficiente, cerrando después para mantener el calor.
- Ejercicio físico y alimentación: Realizar ejercicio moderado diariamente ayuda a mantener un buen estado físico y mental, y aumenta la sensación de calor. En cuanto a la alimentación, se recomiendan comidas frecuentes y de pequeña cantidad, variadas y con alto contenido energético. Las bebidas templadas son reconfortantes y ayudan a mantener la temperatura corporal. Contrario a la creencia popular, el alcohol y las bebidas con cafeína no ayudan a mantener el calor; de hecho, pueden aumentar el metabolismo inicialmente y luego provocar una pérdida rápida de calor.
¿Qué Hacer Ante un Posible Caso de Hipotermia?
Si se encuentra ante una persona que podría estar sufriendo hipotermia, la primera y más importante acción es buscar ayuda profesional. Llame al 112 o acuda a los servicios de urgencia médica más cercanos. El tratamiento de la hipotermia debe ser realizado por personal experto. Sin embargo, mientras llega la ayuda, puede proporcionar asistencia básica:
- Buscar urgentemente un ambiente cálido.
- Proteger a la persona para evitar que siga perdiendo calor.
- Colocar a la persona boca arriba.
- Calentarla de forma muy gradual y pausada, evitando movimientos bruscos. Comience calentando el tronco del cuerpo; puede usar su propio calor corporal. Las extremidades (brazos y piernas) deben calentarse al final, ya que estimularlas primero podría enviar sangre fría al corazón y provocar un fallo cardíaco.
- No frotar el cuerpo, ya que puede dañar la piel y los tejidos.
- Si la ropa está mojada o apretada, cámbiela por ropa seca y ligera. Envuelva a la persona en mantas.
- Si es posible y la persona está consciente, administre bebidas templadas, recordando no dar café, té o alcohol.
- Permanezca siempre acompañando a la persona hasta que llegue el personal sanitario competente.
Preguntas Frecuentes sobre el Frío y la Salud
Aquí respondemos algunas dudas comunes basadas en la información proporcionada:
¿Cuál es la temperatura corporal normal?
Se considera que la temperatura corporal normal del cuerpo humano es de 37ºC.
¿A partir de qué temperatura se considera hipotermia?
Desde el punto de vista médico, una temperatura corporal menor de 35ºC tomada en el recto se denomina hipotermia.
¿Por qué hay más infecciones en invierno?
El frío puede inhibir las respuestas inmunitarias, lo que facilita que ocurran infecciones, especialmente las respiratorias.
¿Qué enfermedades se relacionan más con el frío?
Existe una asociación entre el descenso de la temperatura ambiental y el aumento de enfermedades respiratorias y cardiovasculares.
¿Quiénes son los más vulnerables a los efectos del frío?
Las personas en edades extremas, es decir, menores de 5 años y mayores de 60 años, son los más afectados.
¿Ayuda el alcohol a entrar en calor?
No, el uso inadecuado de alcohol (y cafeína) puede aumentar el metabolismo inicialmente, pero luego produce una pérdida rápida de calor corporal.
¿Qué no debo hacer si alguien tiene hipotermia grave?
No frotar el cuerpo, no exponerlo a fuentes directas de calor intenso, y no administrar bebidas calientes que puedan aumentar la temperatura interna demasiado rápido.
¿Qué debo evitar hacer en caso de congelación?
Nunca frotar, tocar o golpear las áreas congeladas. Tampoco aplicar calor intenso y repentino, como sumergir la zona en agua muy caliente o exponerla a una llama.
Protegerse del frío es cuidar nuestra salud. Conocer sus efectos y cómo reaccionar ante ellos puede marcar una gran diferencia en nuestro bienestar durante la temporada invernal.
Si quieres conocer otros artículos parecidos a El Frío y Tu Salud: Riesgos y Prevención puedes visitar la categoría Salud.
Conoce mas Tipos